Estaba el filósofo Diógenes cenando lentejas, cuando le vió el filósofo Aristipo, que vivía confortablemente a base de adular al rey.
Y le dijo : Aristipo "Si aprendiaeras a ser sumiso al rey, no tendrías que comer esa basura de lentejas"
A lo que Diógenes le replicó: Si hubieras aprendido a comer lentejas, no tendrías que adular al rey"
(Me encanta Diógenes, coherente, genuino, antisistema por convicción. María Ibáñez)
Ojala no hubiera tantos Aristipos sueltos y más maestros que nos enseñaran a apreciar las lentejas... excelente anécdota, no la conocía pero me ha parecido MUY CERTERA. Gracias por traerla.
ResponderEliminarGracias a ti Marisol por tu comentario, reconozco que yo tampoco la conocía, mi única referencia era el llamado "Síndrome de Diógenes" así que al conocer está anecdota me gustó muchísimo su actitud, y estuve leyendo alguna cosa sobre él, y desde luego, Diógenes merece todos mis respetos. Un abrazo María
ResponderEliminarMe gusta tu blog, Maria.Es ameno y sustancioso. El mio lo tengo el pobre muertecito desde hace tiempo. Sigue así. Soy antigua alumna de salesianas Sant Andreu.
ResponderEliminarSiempre aprendpo cosicas con todas vosotras ahora visitare a invivi para que su blog reviva jajaja besos a todas!!
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